From the Pastor's Desk
Thursday, September 15, 2022

Archbishop Thomas Wenski preached this homily at the two Rite of Election ceremonies that took place on March 9, 2025, at St. Mary Cathedral. The Rite of Election marks the start of the most profound period of preparation for those who will receive the sacraments of initiation—Baptism, Confirmation, and Communion—into the Catholic Church during the Easter Vigil.
Today’s Gospel tells of Jesus’ own temptation in the desert, where he fasted and prayed for forty days.
Because he was truly human, like us, Jesus was tempted; but unlike us, he didn’t sin. However, it is precisely because he shared in our struggle with temptations that we can share in his victory over sin, death, and the devil. And this is what Baptism promises us—for if the wages of sin is death, in Baptism, we die with Christ to sin, so that, freed from the snares of Satan, we can rise with him to new life.
El Arzobispo Thomas Wenski predicó esta homilía en las dos ceremonias del Rito de Elección que tuvieron lugar el 9 de marzo de 2025 en la Catedral de Santa María. El Rito de Elección marca el comienzo del período más profundo de preparación para aquellos que recibirán los sacramentos de iniciación—Bautismo, Confirmación y Comunión—en la Iglesia Católica durante la Vigilia Pascual.
El Evangelio de hoy nos habla de la propia tentación de Jesús en el desierto, donde ayunó y oró durante cuarenta días.
Porque era verdaderamente humano, como nosotros, Jesús fue tentado; pero, a diferencia de nosotros, no pecó. Sin embargo, es precisamente porque compartió nuestra lucha con las tentaciones que podemos compartir su victoria sobre el pecado, la muerte y el demonio. Y esto es lo que nos promete el Bautismo: pues si la paga del pecado es la muerte, en el Bautismo morimos con Cristo al pecado, para que, liberados de las trampas de Satanás, podamos resucitar con él a una nueva vida.